En 2012, dos estudiantes de biología crearon el fecomagnetismo, una parodia de las pseudoterapias que aseguraba curar todo tipo de enfermedades mezclando caca con imanes. Solo querían hacer una crítica original y divertida pero se les fue de las manos. ¿Cuánto tiempo tardarían la gente en darse cuenta de que todo era falso?